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jueves, 25 de septiembre de 2014

El gobierno de México aplaudió al asesino Bush como vitorea a Obama porque sirve al imperio de los EEUU

El gobierno de México aplaudió al asesino Bush como vitorea a Obama porque sirve al imperio de los EEUU



1. No me olvido del arrastrado presidente Vicente Fox cuando besó el anillo del papa y cuando recibió a Bush en su rancho llamándole “Yorch por aquí, Yorch junto a mí”. Él fue descarado en su lamizconería, pero casi todos los presidentes mexicanos han mantenido esa relación de subordinación frente a los poderes yanquis. ¿Por qué lo hacen? Argumentan que: a) por la deuda económica, b) por el control del mercado, c) por los millones de migrantes, d) por su relación con la delincuencia, d) para no ser invadidos. Por ello cuando EEUU invade, bombardea, asesina a miles (como hoy en Siria), el gobierno de México siempre guarda silencio, deja que los medios de información deformen las noticias en beneficio del imperio, en vez de condenar las masacres del país siempre invasor. 
2. El presidente Peña Nieto no ha condenado la masacre contra Siria por parte de Obama; éste, con el pretexto de combatir al “Estado Islámico” bombardea al pueblo sirio, pero busca “de rebote” lanzar sus cohetes balísticos y luego invadir a Irán y la India. Aunque Rusia sí ha condenado a los EEUU y el gobierno español, por el contrario, se ha ido contra el gobierno sirio, Peña y su Canciller mantienen un cobarde silencio. Recuerdo que –aunque se disgustara el gobierno de los EEUU- Cárdenas se solidarizó con la guerra civil española, López Mateos no rompió relaciones con Cuba como lo exigían los yanquis; Echeverría Álvarez apoyó a argentinos y chilenos contra los golpes militares, y que López Portillo apoyó la lucha de nicaraguenses y salvadoreños. Peña nada. 
3. Cuando estos gobiernos mexicanos se opusieron a algunos mandatos yanquis, sufrieron también algunos castigos en las ventas comerciales boicoteando sus productos: sin embargo aquellos gobiernos –que se les conoció de la línea del “nacionalismo revolucionario” ganaron cierto prestigio en el mundo que hizo ser a México un líder en América Latina por cierta dignidad e independencia mostrada. Hoy no sólo el gobierno se porta como un “cachorrito del imperialismo” sino también los líderes de los partidos políticos tienen terror de que sean acusados de izquierdistas o comunistas. ¿Puede olvidarse que los altos funcionarios del gobierno generalmente tienen que ser “aprobados” en la embajada de los EEUU, tal como probó el iluso de Vasconcelos en 1929 cuando el embajador gringo le dijo que el candidato oficial era el callista? 
4. Supongo que en yanquilandia la mayoría de los negros, los miserables, los desempleados y perseguidos, votaron por el negro Obama en 2007 con la esperanza de que esa inmensa cantidad (muchos millones) de marginados sociales logren salir de su mundo de tercera o cuarta categoría. Por el contrario los verdaderos yanquis, los multimillonarios, los racistas, los derechistas, votaron para que el gobierno de los “rubios” continúe como desde hace siglos. Obama ganó porque el sistema capitalista siempre ha sabido que no importa si llega al poder un negro, una mujer o un homosexual. Eso no es importante sino la ideología del gobernante y el poder que posea el verdadero poder: los monopolistas petroleros, los bancos, los fabricantes de armas. 
5. Obama, el intelectual universitario y su equipo de asesores sabían más que nadie que gobernar para EEUU –el policía mundial, el país más intervencionista y asesino de la historia, en el que mandan los grandes bancos y el Pentágono- era obedecer esos poderosos intereses. ¿Alguien iluso o necio pudo pensar en que algún día el gobierno de los EEUU podría ser distinto mientras esté a la cabeza del capitalismo mundial? Si en México de capitalismo débil nunca he votado, jamás lo haría en los EEUU de capitalismo opresor –si viviera allí- en donde los individuos o las personas sólo existen para trabajar y consumir en beneficio de grandes empresas cuyos dueños dominan de manera total la política y la economía. 
6. Afganistán, Irak, Irán, así como Libia, Siria, Palestina –que rodean la zona petrolera del Golfo Pérsico- durante décadas no han dejado de ser bombardeados por los EEUU e Israel, así como otros aliados como Inglaterra, España y Francia. El objetivo jamás ha dejado de ser el petróleo que tanto necesita el imperio y sus aliados. Para justificar sus masacres contra esos países del llamado “Cercano Oriente” se han inventado miles de pretextos que los medios de información a su servicio ponen a circular, desde “armas escondidas”,” avionazos en las Torres Gemelas”, construcción de “armas nucleares” o “gobiernos tiranos”. Así como los yanquis inventan, así el gobierno de México impone cargos contra sus presos de oposición. 
7. Desafortunadamente -como sucede en México con las organizaciones sociales progresistas que están aisladas frente a un poderoso enemigo capitalista- sucede entre esos países de cercano oriente (musulmanes, islámicos, mahometanos) que por prejuicios religiosos o de raza no alcanzan unirse contra el imperialismo que los bombardea y asesina por decenas de miles. En México parecen no darse cuenta delo que sucede en el mundo porque la población vive desesperada buscando que comer junto a sus hijos hoy o mañana y los políticos y gobiernos sólo están interesados por acumular capital y poder político que les asegure años venideros. ¡Muera el imperialismo agresor!



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